Un estudiante de San Diego de 23 años, Daniel Chong, ha denunciado que la DEA (la agencia antidroga de EE UU) le tuvo recluido en una celda mínima, incomunicado y sin comida ni bebida durante cinco días. Chong incluso se vio obligado a beber su propia orina para sobrevivir.
Según su denuncia, el joven fue detenido en una redada en San Diego el pasado 21 de abril. Al parecer, había ido a una fiesta en la que se había producido una redada antidroga. Él ha admitido que fue a la fiesta a fumar marihuana.
Continuar leyendo